
Para
esta generación de Venezolanos fue un privilegio vivir este tiempo donde
conocimos y acompañamos al Comandante presidente Hugo Rafael Chávez Frías,
fueron 58 años gloriosos de una vida sin desperdicio, llena de una fuerza
espiritual, disciplina, anegación, claridad, responsabilidad, pasión, amor,
contundencia, abnegación, solidaridad, constructor del socialismo bolivariano y
de un profundo amor por la patria. Este hombre único, de espíritu transparente,
de una lealtad infinita con su pueblo, llego para redescubrirnos y encarno las
luchas de todos los caídos a lo largo de la historia de esta Latinoamérica.
Chávez
en su desaparición física rompió la maldición de nuestros libertadores
olvidados en su muerte y hoy un peregrinar de miles vienen a Caracas, por todos
los caminos para acompañar y redimir a este hijo predilecto de la patria.
Pero
ya no está ahí, se fue hecho niño por ahora, para saltar por los campos lejos,
al encuentro de Bolívar, de Sucre, de Miranda, del Che, allá va el arañero de
Sabaneta de Barinas que nació el 28 de julio de 1954, corriendo entre niños pata
en el suelo, riendo y jugando, soñando con la patria buena de Alí, consagrado
al Cristo de los pobres él seguirá con el humilde encarnando sus luchas.
Chávez
aparecerá en los rincones de las escuelas, de las universidades, en el barrio,
en las fábricas y se hará grupo, comuna, aliento, vida, grito contra lo injusto,
verbo defensor de la mujer, revolucionario incasable de los imprescindibles que
andan por ahí recorriendo pueblos y ciudades, él responsable de cada labor
aparecerá con la verdad, a dar la cara por cada acción hecha, sin miedo, sin
remordimientos, pues él se hará carne y hueso otra vez en los hombre y mujeres
que luchan día a día por un mundo mejor.
Si
camaradas, tengan la seguridad de que este hombre humilde, estará siempre aquí, eterno, vivo,
multiplicado por miles, en cada lucha abrazado con su pueblo, rompiendo los
protocolos para hacer valer lo justo. No será fácil, pero sus palabras serán
siempre el aliento para seguir las luchas por venir y por ganar.
Él,
indio, negro, blanco, aparecerá en la mañanita de los llanos, en los aló por
venir, él se hará copla, canto, deporte, palabra, cuento, pintor en el correr
del día, él, recluta, soldado, insurrecto, rebelde, candidato, comandante surgirá
en las noches para tomar ideales y sueños para crear la patria socialista.
Chávez
eterno se fue por los caminos polvorientos de la América como un vendaval de
amor a conquistar los pueblos, que se convertirán en lucha revolucionaria.
Por: JLH24